Traumatología de rodilla

Prótesis de rodilla en Madrid y Segovia

Desde la unidad de rodilla del Dr. David Cimas, especialista en cirugía ortopédica y traumatología deportiva, ofrecemos un abordaje integral y personalizado para pacientes que requieren un reemplazo articular mediante prótesis de rodilla. Este procedimiento está indicado cuando el desgaste articular es severo, como en casos de artrosis avanzada, deformidades articulares o dolor crónico que no mejora con tratamiento conservador. En nuestras consultas de Madrid y Segovia, aplicamos técnicas quirúrgicas de última generación, incluyendo la cirugía robótica, para lograr la mayor precisión, menor tiempo de recuperación y una rehabilitación funcional más rápida y segura.

¿Qué es una prótesis de rodilla?

La prótesis de rodilla es un implante diseñado para sustituir total o parcialmente las superficies articulares dañadas de la rodilla. Está compuesta por varios componentes fabricados con materiales biocompatibles como metal, plástico de alta resistencia o cerámica. Su objetivo principal es aliviar el dolor, restaurar la movilidad y mejorar la calidad de vida del paciente. Este procedimiento se considera cuando los tratamientos conservadores han fracasado y el deterioro articular impide realizar actividades cotidianas.

Indicaciones para una prótesis de rodilla

  • Artrosis de rodilla en fases avanzadas

  • Artritis reumatoide con daño articular irreversible

  • Deformidades articulares severas (varo/valgo)

  • Necrosis avascular del fémur distal o tibia proximal

  • Dolor crónico incapacitante y limitación funcional severa

Diagnóstico

El diagnóstico para indicar una prótesis de rodilla se basa en una combinación de evaluación clínica detallada, pruebas funcionales y estudios de imagen. El Dr. Cimas realiza una historia clínica completa para entender los síntomas, el grado de limitación y el impacto en la calidad de vida. Posteriormente, se complementa con:

  • Radiografías: permiten observar el grado de desgaste articular y las deformidades óseas.

  • Resonancia magnética (RMN): útil para valorar el estado de los tejidos blandos como ligamentos y cartílago.

  • Análisis de la marcha y fuerza muscular: fundamentales para planificar una rehabilitación individualizada.

Un diagnóstico certero permite determinar el tipo de prótesis más adecuada y diseñar el plan quirúrgico personalizado.

Tipos de prótesis de rodilla

Existen varios tipos de prótesis de rodilla, cada una adaptada a la condición clínica y a las necesidades funcionales del paciente:

Prótesis total de rodilla: Reemplaza completamente las superficies articulares del fémur, la tibia y, en algunos casos, la rótula. Es el tipo más común y se indica en casos de artrosis generalizada o daño extenso.

Prótesis parcial o unicompartimental: Solo sustituye uno de los compartimentos de la rodilla (interno, externo o femoropatelar). Se utiliza cuando el daño está localizado y las demás estructuras están en buen estado. Permite una recuperación más rápida y preserva mayor parte de la anatomía natural.

Prótesis de revisión: Se emplean cuando una prótesis previa ha fallado, ya sea por aflojamiento, infección o desgaste. Requieren componentes especiales y experiencia quirúrgica avanzada.

Prótesis cementadas y no cementadas: Dependiendo de la calidad ósea, el implante puede fijarse con cemento quirúrgico o mediante técnicas de anclaje biológico que permiten que el hueso crezca en la prótesis.

La elección del tipo se basa en la edad del paciente, su nivel de actividad, estado óseo, patología de base y expectativas funcionales.

Tratamiento quirúrgico y postoperatorio

El procedimiento quirúrgico para colocar una prótesis de rodilla consiste en la resección de las superficies articulares dañadas y la colocación de los componentes protésicos en su posición anatómica. El Dr. Cimas emplea técnicas de cirugía mínimamente invasiva y cirugía robótica, que permiten:

  • Menor sangrado intraoperatorio

  • Reducción del riesgo de complicaciones

  • Mayor precisión en la alineación de la prótesis

  • Tiempo de recuperación más corto

Tras la intervención, el paciente inicia un programa de rehabilitación guiado por fisioterapeutas especializados. El postoperatorio incluye:

  • Control del dolor con medicación personalizada

  • Ejercicios de movilización precoz para prevenir rigidez

  • Reeducación de la marcha con ayuda progresiva

  • Ejercicios de fortalecimiento muscular y recuperación funcional

En la mayoría de los casos, los pacientes pueden caminar con ayuda desde los primeros días y recuperar una buena función articular en pocas semanas, con mejoras significativas en dolor, movilidad y calidad de vida.

Contáctanos sin compromiso:

Localización

Pide cita sin compromiso